Preguntas frecuentes
Hemos hecho un listado de preguntas y respuestas que surgen frecuentemente cuando hablamos de Orientación Vocacional
Cuando hablamos de orientación profesional nos estamos refiriendo a los servicios y actividades cuya finalidad es asistir a las personas, de cualquier edad y en cualquier momento de sus vidas, a ejercer opciones educativas, de formación y laborales y a gestionar sus profesiones. Esta definición incluye hacer más accesible la información acerca del mercado laboral y sobre las oportunidades educativas y de empleo, organizándola, sistematizándola y asegurando su disponibilidad cuando y donde las personas la necesiten. También implica ayudar a las personas a reflexionar sobre sus aspiraciones, intereses, competencias, atributos personales, calificaciones y aptitudes y establecer correspondencias con las oportunidades de formación y empleo disponibles. En países de altos ingresos se habla de orientación profesional y no orientación vocacional, dado que esta última enfoca en la elección de una ocupación y se distingue de la orientación educativa, que trata de las opciones de cursos de estudio. La orientación profesional une a ambos términos y hace hincapié en la interacción entre el aprendizaje y el trabajo (Hansen, 2006).
En términos más sencillos, la orientación vocacional es un proceso que te permite elegir una ocupación a través del estudio de tus características personales (rasgos de personalidad, aptitudes, inteligencias múltiples, intereses profesionales-ocupacionales) y es un proceso de tipo preventivo (en el sentido de garantizar tu permanencia y culminación de estudios para alcanzar tu profesión u ocupación); mientras tanto, la orientación profesional está más interesada en prepararte para un trabajo acercándote la información necesaria y aunque también en este proceso se identifican las características personales, están más relacionadas con el hecho de identificar si corresponden a las oportunidades de formación y empleo disponibles, más que al hecho de elegir una ocupación.
Sí es importante escuchar lo que tus padres o familiares tienen que decir en relación con la elección de tus estudios, ya que ellos han vivido algunas o más experiencias (o las han visto en otras personas) diferentes a las tuyas a estas alturas de tu vida; experiencias que podrían ayudarte a considerar algunos elementos que probablemente no tengas claros. Pero tanto ellos como tú deben estar conscientes que la elección final únicamente la tomarás tú.
Además todas las personas hemos sido creadas diferentes (incluso los gemelos), por lo cual, alguna profesión puede ser muy adecuada para algunas personas, pero totalmente inconveniente para otras. Es importante hacerle ver a tus padres que si esas personas triunfaron en su ocupación, influyeron elementos como el reconocimiento de las características personales y otras oportunidades que su entorno les favoreció (que probablemente sean diferentes en tu caso).
También debes tener en cuenta que no solo tu familia te hará preguntas o comentarios sobre tu decisión vocacional, sin importar lo mucho que valores a esas personas debes mantenerte firme en la decisión que mejor te convenga a ti, basándote en la identificación que has realizado de tus características personales e intereses vocacionales. Recordá que todos pueden opinar, pero solo vos decidirás.
Una de las recomendaciones que podemos hacerte es lo que también se hará en una institución educativa donde se imparta la orientación vocacional, debes INFORMARTE. En la medida en que busques información y realices algunos ejercicios (identificar tus habilidades, las asignaturas en las que obtenes mejores calificaciones, tus intereses vocacionales, las especialidades de bachillerato, cursos de formación profesional, estudios superiores universitarios o no universitarios, becas, oportunidades de emprendimiento) podrás tomar una decisión vocacional más acertada. Además este sitio pretende convertirse en un aliado para los jóvenes que se encuentran en un momento decisivo de sus vidas, por lo que será importante también que PREGUNTES, esa simple actividad de preguntar puede esclarecer tu decisión y puedes formular preguntas a profesionales que se encuentran estudiando o ejerciendo la profesión u ocupación que a ti te llama la atención, también es importante que preguntes si en el centro de estudios en el cual estás interesado se cuenta con algún programa de estudios socioeconómicos o becas, si consideras que el problema principal para seguir estudiando tiene que ver con los bajos ingresos económicos de tu familia.
Tendrás que demostrarle a tu familia por qué consideras que sos buen candidato para la profesión u ocupación que has seleccionado, podrías mostrarles los resultados de algún cuestionario de aptitudes, inteligencias múltiples y/o de intereses profesionales; con el propósito de hacer ver que tus características marcan otra ruta, distinta a la que ellos consideran que es buena para vos. También puede ser de utilidad que junto a los resultados de los cuestionarios les mostres las asignaturas que tendrías que cursar si te decidís por la carrera que ellos están seleccionando; junto a esto, tus calificaciones del último año de estudios o las actuales, porque probablemente las asignaturas que tengas que cursar en la carrera de interés de tu familia son precisamente en las que no te ha ido muy bien en cuanto a rendimiento académico se refiere. Recuerda que en la medida en que te informes, así podrás justificar las razones por las cuales no queres estudiar la profesión u ocupación que tu familia desea.
Frecuentemente se escucha a muchos jóvenes decir que la razón por la cual no continuarán con su preparación académica, se debe a que su familia o encargados ya no pueden seguir invirtiendo en la educación de esta persona o que debe trabajar para ayudar a la economía del hogar. En ese sentido, no te decimos que no podes apoyar a tu familia trabajando, pues si debes hacerlo, es porque tu familia o encargados han visualizado que ya no podrán seguir sosteniendo la economía familiar, por tanto deberás comprometerte más a los compromisos que te exigirán en tu trabajo y al mismo tiempo, debes informarte sobre las modalidades flexibles para continuar con tu preparación académica de nivel medio.
La otra alternativa que tenes, es informarte sobre las oportunidades que están vigentes en tu departamento o municipio para jóvenes como vos que desean continuar estudiando, sobre el tema de becas de estudio o algunas instituciones que ofrezcan estudios socioeconómicos para subsidiarte parte de tus estudios, la compra de materiales didácticos o alimentación, transporte u otros insumos. En algunos otros casos, existen algunos grupos de personas altruistas que “apadrinan” a uno o varios jóvenes y se encargan de su educación por cierto período de tiempo, esta es otra oportunidad que tendrías que investigar si existe en tu comunidad, municipio o departamento. En este sitio compartimos algunos links que puedes consultar para realizar consultas al respecto y puedas seguir estudiando.
Finalmente, si estás pensando que todas las becas que se ofrecen son para jóvenes cuyos promedios se encuentran en un rango entre 8-10, estás equivocado, pues algunas instituciones están más interesadas por que los jóvenes estudien y se preparen académicamente y no tanto porque se preocupen por alcanzar el máximo en calificaciones, pues ese aspecto no es del todo determinante para reconocer que esa persona será exitosa en su vida profesional o académica.
La mejor opción que tienes para responder esta interrogante, que es de lo más frecuente entre los jóvenes que se encuentran finalizando sus estudios de noveno grado o de bachillerato, es obtener información suficiente de las opciones que a te atraen o en las que estas interesado. Te sugerimos que realices un cuadro comparativo donde podas observar las características de cada opción, el tiempo de duración, las asignaturas que cursarías, las aptitudes que debe tener el candidato, las opciones de trabajo que tenes una vez finalices tus estudios, qué opciones de estudios posteriores se te ofrecen cuando termines tus estudios, cuáles son algunas contraindicaciones médicas para estudiar ese campo profesional, salario promedio mensual que podrías recibir al graduarte. Cuando lo tengas completo, deberías realizar una lectura detenidamente, considerando elementos de cada opción donde identifiques elementos que favorecen a uno u otra opción. Si aún con este cuadro te sigues sintiendo confundido o atraído por varias opciones, puedes priorizar las opciones, de acuerdo a aquellos elementos que te convienen o que mejor responden a tus características personales y considerar estudiar algún curso corto que tenga relación con las otras opciones que te interesan pero no quedó como la indicada, podría convertirse en algún pasatiempo o hobby (por ejemplo, te puede atraer ser músico, pero esa opción no fue la que consideraste para estudiar; podrías entonces estudiar algún curso en alguna academia o con alguna persona que se dedica a este ámbito para aprovechar tu tiempo libre). En resumen, la información en calidad y cantidad es necesaria para equivocarte menos y tomar mejores decisiones.
Sin duda, te podrías equivocar… ¡a muchas personas les ha sucedido! La intención de que antes de tomar una decisión sobre la carrera u ocupación a la que te vas a dedicar el resto de tu vida, te apliques algunos cuestionarios para sondear tus características personales, revises la información de las opciones que tenes y sobre todo que identifiques cuáles son algunas dificultades comunes para continuar con tus estudios; es decir, pases por un proceso de orientación vocacional, es precisamente para evitar que te equivoques en la decisión que estas por tomar, recordá que en la medida en que te encontres suficientemente informado, así serán de fuertes tus decisiones vocacionales y te irás convenciendo conforme pase el tiempo de las mismas. Ahora bien, hemos dejado en negrita la palabra evitar, porque la equivocación podría ocurrir, pero lo mejor que puedes hacer es reorientar tu decisión y valorar que no has perdido el tiempo, más bien ganaste conocimientos en áreas que aunque no eran de tu agrado o interés (pero esperamos que estes de acuerdo) que hasta lo desagradable que nos ha sucedido, ha dejado aprendizajes importantes en tu vida.
Definitivamente tenes que buscar la mayor cantidad de información posible para que no te sientas frustrado cuando ya hayas iniciado tus estudios, no inicies a estudiar algo de lo que no te sientas completamente seguro. Las sugerencias que podemos darte se detallan a continuación:
- Revisa información en Internet (este sitio es una buena idea para comenzar a informarte).
- Pregunta a personas que han estudiado la carrera, ocupación u oficio que a vos te interesa.
- Platica con otras personas que se encuentran actualmente estudiando esa carrera u ocupación que te interesa.
Hasta que estes completamente informado y seguro de tomar la decisión podrías iniciar con tus estudios, como verás en las respuestas de esta sección la clave está en que te informes de lo que pretender realizar.
¡Definitivamente no! A menos que los dos tengan exactamente las mismas características personales después de aplicarse un cuestionario o test psicológico; pero debes saber que las personas pueden ser muy parecidas, compartir algunos gustos o intereses por ciertas actividades, pero eso no significa que podrán encontrar la autorrealización más adelante en su etapa adulta. Debes recordar que estás hablando de dedicarte a esa actividad por el resto de tu vida, es una decisión que no podes dejar al azar o para que otra persona decida por vos, sea porque es tu mejor amigo, novio o familiar, incluso. Todas esas personas podrían sugerirte, pues te conocen muy bien, pero quien tendrá la última palabra en estas (como en otras decisiones importantes) siempre serás vos.
No en todos los casos o instituciones que ofrecen este tipo de oportunidad para continuar con tu preparación académica te van a solicitar notas entre 8 – 10. Algunas instituciones están más interesadas en la continuidad y permanencia de jóvenes en sus estudios y no tanto en que se logre una calificación de 9 y 10, pues aunque eso demuestra que el estudiante es aplicado, tampoco es una muestra de qué tan inteligente es o qué tanto merece o no una beca. Te sugerimos que revises siempre entre los requisitos de las instituciones que otorgan becas, cuál debe ser el rendimiento académico mínimo que se espera de ti para no perder el beneficio al cual has accedido.
¡Definitivamente sí!, aunque el resto de personas te digan lo contrario, siempre podrás cumplir tu proyecto de vida; con la única diferencia que los tiempos y las responsabilidades serán mayores, para alcanzar tus metas personales y profesionales tendrás que esforzarte más y mejor pero debes tener presente que el nuevo miembro de la familia también necesitará condiciones aptas donde crecer y desarrollarse, esas condiciones podrás ofrecerlas si continuas tu preparación académica. Es importante también que no abandones tus estudios, las leyes de nuestro país velan por tu derecho a la educación y puedes finalizar tus estudios en las instituciones de educación pública. Además, si tenes que trabajar, podrías inscribirte en alguna de las modalidades flexibles para no detener tu trayectoria académica y continuar con tu preparación.